1. Inicio
  2. /
  3. Noticias del pelotón
  4. /
  5. El récord de la hora, otra manera de emoción en el ciclismo

El récord de la hora, otra manera de emoción en el ciclismo

Por El Aguador – Uno de esos momentos en los que me doy cuenta de que los años pasan es cuando leo cosas del pasado para algunos post o actualizaciones en nuestro grupo de Facebook. Hoy me ha pasado cuando me ha dado por leer sobre el récord de la hora y he visto que la época en la que esta prueba se convirtió en un tema de actualidad fue… a mediados de la década de los 90, hace casi 20 años!!

A lo largo de los años ha tenido sus momentos de más interés y de menos. El primero que hemos encontrado documentado fue el récord de Henri Desgrange, uno de los fundadores del Tour de Francia, que recorrió 35,325 kilómetros en 60 minutos. En años sucesivos el récord fue aumentando e incluso lo atacaron y consiguieron algunos de los grandes nombres del cicislismo, como Fausto Coppi en 1942 (45.798 km.), Anquetil en 1946 (46,159 km.) o Eddie Mercks en 1972 (49,431 km.).

Precisamente este récord de Mercks permaneció unos años en vigor hasta que Francesco Moser lo batió 12 años después en Ciudad de México. Y además no lo batió una, sino que lo hizo dos veces en cuatro días, dejándolo el 23 de enero de 1984 en 51,41 kilómetros en una hora.

Este récord estuvo vigente durante varios años hasta que al Escocés Volador, también conocido por Graeme Obree le dio por innovar en el diseño de las bicicletas y la postura en la misma y estableció una nueva marca con 51,596 kilómetros. Era un 17 de julio de 1993. Dicen que se hizo la bicicleta usando algunas piezas de lavadora… No sé si esto será cierto, pero desde luego que lo que sí le puso en grandes cantidades fue ingenio e imaginación.

Pues bien, si a Moser el récord le había durado 9 años, a Obree no le duró ni una semana y el 23 de julio “un tal” Chris Boardman se lo birlaba y lo dejaba en 52,270 km. El pique entre los dos tuvo un nuevo capítulo cuando en abril de 1994 Obree volvía a recuperar el trono con la famosa posición “supermán” sobre la bici, que como la posición “huevo” del anterior récord fue posteriormente prohibida por la UCI.

Estaba la marca en 52,713 km, cuando una tarde del 2 de septiembre llegó nuestro Miguel Indurain y subido en la mítica Espada de Pinarello lo superó dejándolo en 53,040 metros. Indurain era un súper clase contra el crono, y de hecho en la brutal contrarreloj de Luxemburgo había hecho dos años antes los 65 kilómetros a un ritmo de algo más de 49 kilómetros por hora de media. (49,046 para ser exacto)

Por aquel entonces uno de los archienemigos del de Villaba era Tony Rominger, un suizo con mucha clase pero al que le sucedió como a Bugno o Chiapucci, y es que se encontró con Miguel Indurain en la carretera. Como en la carretera no podía con él, probó en la pista y allí lo batió dos veces en un mes. Su segundo récord, logrado en noviembre de 1994, llegó hasta la brutal cifra de los 55,291 km. La cosa iba a ser complicada para superar el registro del triple ganador de la Vuelta Ciclista a España.

Complicada, pero no imposible. Y es que fueron dos los años que tardó Boardman en recuperar el trono que le había arrebatado el menudo suizo, pero lo hizo en septiembre de 1996 llegando hasta los 56,375 metros recorridos. Esta marca supuso el final de una historia emocionante y de superación física y también mecánica.

En el año 2000 la UCI dictaminaba que los récords de la hora tenían que batirse con bicicletas estándar. Nada de lenticulares, cuadros muy adaptados, manillares de triatleta… Desde mi punto de vista, una de esas decisiones muy discutibles que de vez en cuando toma la UCI, una organización conservadora a ultranza. No sé qué tiene de malo que se agudize el ingenio en el diseño de bicicletas o de posturas sobre la misma. No sé, si en la Fórmula 1 fueran así, igual ahora mismo no tendríamos en los coches de calle alguna de las soluciones de seguridad, aerodinámica o motor de las que disfrutamos ahora.

Todos los récords antes de Eddie Mercks fueron desposeidos del título oficial y entraron dentro de una categoría llamada “Mejor esfuerzo humano”. Y como mejor esfuerzo humano siguen estando vigentes los 56 kilómetros y pico de Chris Boardman.

El récord de la hora perdió interés, pero el británico Boardman también quiso hacerse con él y en Manchester lo batió dejándolo en 49,441 kilómetros en el año 2000. El actual récord lo posee el checo Ondrej Sosenka con 49,700 kilómetros recorridos hace ya ocho años.

Personaliza ahora tu maillot

Compartir:

Otros artículos que te pueden interesar

Personaliza ahora tu maillot

¿Tienes un club al que quieras personalizar tu equipación? ¿Eres de los que tiene su propio estilo? Aquí podréis dar rienda suelta a vuestra imaginación. ¡Decirnos vuestra propuesta y sólo tendréis que ponéroslo!

Menú