Por Techo Díaz.- Hasta ahora, el ciclismo siempre se había caracterizado por ser un deporte que requería una gran potencia en las piernas. Los brazos tenían su misión: sujetar la bici, cambiar de marcha, coger el bidón de agua, apartar a tus fans cuando estás subiendo el Alpe d’Huez o incluso saludar -educadamente- a los viandantes; pero desengañémonos, tenían un papel secundario.
Y así había sido desde los primeros velcípedos hasta la irrupción del alemán Martin Kleiss, que pretende revolucionar el mundo del ciclismo con su nueva bici Varibike. Según leo en el blog de Rafael Díaz Justo, Merkabici, se trata de un aparato que permite pedalear a la vez con brazos y piernas, lo que además de los consabidos beneficios cardiovasculares, permite obtener un 30% más potencia que una bicicleta convencional.
El invento tiene su miga. Por lo que cuentan, es especialmente efectivo cuando la carretera se pone cuesta arriba y cualquier ayuda es más que bienvenida. El aparatejo ha sido probado en la universidad de Nuevo México, en Albuquerque (Estados Unidos), donde se realizó un estudio que confirma las ventajas de utilizar brazos y piernas para lograr una mayor velocidad, sin dejar atrás el doble e intenso trabajo cardiovascular, a todas luces beneficioso para la salud.
Una pena para los defensores de ir en bici sin manos, toda una tribu que había logrado protagonizar verdaderas obras de arte -baste recordar este video– en los últimos tiempos.
Eso sí, Varibike es cara, al menos de momento. La bicicleta, que pesa 15 kg y está fabricada en aluminio con accesorios de Shimano y Ritchey, ha salido a la venta por cinco mil dólares, unos 3.800 euros. Ser el único de tu barrio que pedalea con las manos tiene un precio.
Y si no, mirad como se divierte el bueno de Kleiss en este video pedaleando con las manos
