Por Techo Díaz.- El mundial de Doha es un experimento un poco extraño. Las condiciones climáticas de Qatar han obligado a retrasar el evento, y el viento que sopla en el desierto hace que ni los velocistas tengan del todo claro que la victoria se va a dilucidar al sprint. No al menos en un sprint masivo.
El mundial es tan raro que, por primera vez en muchos años, ni siquiera irá Valverde. El también velocista murciano era claro en sus palabras al terminar ayer Lombardia. “No estaré en Qatar”, decía a pesar de haber entrado en la preselección de Javier Mínguez. Tampoco estarán, como es lógico en un país sin cuestas, Samuel Sánchez, Alberto Contador, Dani Moreno o Mikel Landa. Es el turno de los velocistas.
¿Y quién tenemos en España? Pues unos cuantos, aunque el nombre de los Cavendish, los Greipel y los Kittel tengan por costumbre eclipsarlos. Está claro que España no es una potencia en sprinters y que tiene muy difícil brillar en las etapas de las grandes vueltas. También será así en el mundial, no nos engañemos. Las opciones de victoria de los españoles son mínimas, aunque no inexistentes. Todo pasa por una carrera loca donde el control se rompa y no haya sprint masivo, sino una llegada donde sean muy pocos los que se le jueguen.
Fran Ventoso, Juanjo Lobato y Carlos Barbero tienen punta de velocidad. Lobato ya sabe incluso lo que es ganar en el desierto. Y bueno, nunca se sabe, nadie conocía a Freire cuando ganó su primer arcobaleno. Lo bueno es que esta vez España se quita de enmedio la responsabilidad de controlar la carrera. Los Minguez Boys son ahora versos libres, y si el viento la lía y Maté, Fraile o De la Cruz pillan el corte bueno igual pueden sorprender a los hombre rápidos.
Los 9 corredores que representarán a España en el mundial de Doha 2015 son: Fran Ventoso, Juanjo Lobato, Carlos Barbero, Luis Ángel Maté, Omar Fraile, David De la Cruz, Jonathan Castroviejo, Imanol Erviti y el joven Diego Rubio. Erviti y Castroviejo probarán suerte también en la contrarreloj, donde el flamante campeón de Europa, si ha conseguido alargar el punto que tenía en La Vuelta, tiene opciones serias de medalla.
Lo cierto es que, más allá del recorrido (que alguna vez tiene que ser para sprinters), el hecho de retrasar tanto el campeonato del mundo ha desanimado a muchas figuras del pelotón, agotados ya tras una temporada tan larga. Ésa es la condena y a la vez la magia de este circuito. Aunque pensado para velocistas, podría ganar cualquiera…
