¿Dónde estará el norteamericano de hierro?
Planteando una de las cuestiones que más líneas escritas y cometarios van a desatar en próximas fechas y que ya lo ha hecho, desde luego, en nuestro pequeño hueco dedicado al noble deporte de la bicicleta, queremos, y a mi personalmente, me parece interesante preguntaros ¿vosotros creéis que el norteamericano de hierro estará en condiciones de disputar el Tour de Francia?
Sin duda es una cuestión que añade salsa picante, y de la buena, al próximo Tour de Francia. Como todos ya sabemos, Lance Armstrong, al que desde aquí llamamos el norteamericano de hierro, hasta la disputa de la ronda gala, no va a hacer ningún tipo de alarde ciclista. No le vamos a ver disputar ni ganar ninguna otra carrera, como ha hecho siempre. No es nuevo, su preparación es casi exclusiva de cara al Tour, en eso creo que todos estamos de acuerdo; ahora bien, ¿qué papel desempeñará en la carrera francesa? ¿Podrá ser capaz de disputar el Tour al mejor ciclista de la actualidad y gran favorito en la ronda gala, Alberto Contador? ¿Podrá al menos estar en el podio de París? ¿Será tan decisivo el súper-equipo de incansables sherpas de la bicicleta que siempre escoltan al norteamericano hasta lo más alto de las cumbres pirenaicas y alpinas? ¿Bruyneel se tendrá que acordar de cómo afeó, tapó el ciclo natural de la vida y dio de lado al que, por justicia, era el mejor ciclista del mundo el año pasado?
Son muchas las cuestiones que podemos plantear sobre este asunto y seguro que vosotros, nuestros aguerridos y fieles lectores, nos acercareis a muchas nuevas en nuestra conversación. Os escucharemos con mucha atención. Ahora, os voy a responder a algunas de estas cuestiones:
Armstrong no ganará el Tour de Francia. Armstrong lo tendrá muy difícil para subir al cajón de París. Armstrong ha sido el mejor ciclista del mundo en la carrera gala, las cifras así lo dicen, pero este año el tren de la victoria ya lo ha cogido por derecho otro ciclista. Si las fuerzas de la diosa fortuna están con el corredor de Pinto, ganará su tercer Tour de Francia. El súper RadioShack de Bruyneel será un grandísimo equipo, pero con un líder que no podrá responder a todas sus expectativas.
El director Belga seguro que no se arrepiente de su decisión, de no haber apoyado como debía haber hecho el año pasado a su ciclista, a su líder, a Alberto Contador. Y no lo va a hacer porque bajarse del burro en mitad del monte no es de buen arriero. Respetable decisión, desde luego, porque él ya decidió apostar por el ciclista que más triunfos le ha dado, en el pasado claro; pero Johan, ¿no es tan digno y de justicia apostar y apoyar al mejor? En su día lo hiciste por con mejor, Armstrong, sí señor! Ayer –el año pasado- el mejor era otro, y te lo demostró.
No quiero centrarme más en este último asunto, creo que ya se ha hablado mucho y claro sobre él y cada uno tenemos nuestra opinión bien formada.
Por último, os quería plantear una última cuestión. Tengo un gran respeto y admiración hacia Armstrong –como deportista- al igual que la tengo por otro gran campeón, Michael Schumacher. Mi mente no deja de asociar las decisiones tomadas por ambos campeones; los hombres de los siete títulos, los tipos de hierro, los que en su día eran intocables, intratables. ¿No os parece que ambos se han equivocado al querer reverdecer viejos laureles cuando la tierra ya no era lo fértil que se requiere a tan alto nivel? ¿No os parece que el viejo dicho de una retirada a tiempo es una victoria? ¿No os parece que la gloria y la grandeza de la historia se tienen que respetar tanto, tanto, como para no mancharlas en un momento, en el que por Ley de vida, ya no tocaba?
Yo creo que SÍ. Yo creo que el norteamericano de hierro y el Kaiser se han ahogado en su propia vanidad.
Como último apunte, diré que la Fórmula 1 y el ciclismo no comparten muchas cosas, algunas sí, si no os ha gustado la comparación, pido perdón; pero para mí era inevitable mencionar ambos casos, que tanto se parecen.
Por Un señor de Toledo
