Espectacular inicio de Vuelta del equipo Katusha. Victoria ayer sin paliativos de Dani Moreno en Sierra Nevada y victoria estudiada y perfectamente ejecutada de Purito Rodríguez en el muro de Valdepeñas de Jaén, previo soberbio lanzamiento del corredor de moda y revelación de la Vuelta, Dani Moreno.
A Dani Moreno le está saliendo todo bien en esta Vuelta. El corredor de Fuenla está en racha, y de seguir así, va acabar quitándole protagonismo y anuncio de Pesi al otro famosillo del barrio, ese que ahora juega en el Chelsea. A sus 30 años, y tras haber pasado por equipos como el Caisse d’Epargne, el Omega Lotto o el Relax, es ahora cuando el escalador parece estar encontrando su momento de forma óptimo, aquel con el que todo ciclista merece encontrarse por lo menos una vez en su carrera.
Gregario de los buenos, no fue hasta ayer cuando consiguió su primera gran victoria en una grande por etapas, coronándose nada menos que en Sierra Nevada, y a punto ha estado de repetir victoria hoy en el muro de Valdepeñas de Jaén, con rampas de hasta el 25%, donde finalmente ha trabajado a favor de su líder, Purito Rodríguez, el mismo que hace sólo un año tiró de él para que firmara por la escuadra rusa Katusha, gran dominadora de este inicio de la Vuelta Ciclista a España 2011.
Moreno es ahora segundo en la general, líder por puntos y líder de la montaña, y dado sus actuales condiciones y la ausencia de sprints y de sprinters en esta Vuelta, no sería extraño que decidiese intentar quedarse el maillot verde o el de lunares azules hasta el final. Desde luego, sería un justo premio no sólo a su espectacular arranque, sino a toda su carrera como ciclista.
Dos son las incógnitas que se plantean ahora sobre los corredores de moda de la Vuelta. Una, si Purito será capaz de no perder seis minutos en la contrarreloj de Salamanca y ganar la Vuelta que se merece y otra, si Dani Moreno será capaz de arrebatarle protagonismo a su paisano futbolista y acabar siendo el reclamo de una conocida marca de bebidas refrescantes. Cosas más raras se han visto.
Por Techo Díaz
