Por un Señor de Toledo.- En nuestro recorrido por las etapas más interesantes, sobre el papel, de esta edición del Giro de Italia vamos a centrarnos en la etapa 14, que se disputará el próximo 18 de mayo, entre Cervere-Bardonecchia con 168 kilómetros de recorrido.
Es una etapa de las consideradas de alta montaña y como vais a poder ver en el perfil, cuenta con dos subidas importantes, la primera de ellas es la ascensión Sestriere, cuya cima está situada en el kilómetro 125 de la etapa. La segunda de las subidas y final de etapa es la de Jafferau da Bardonecchia. Dos puertos muy distintos pero con una disposición en carrera muy interesante: el primero, Sestriere es mucho más largo y tendido; y el segundo, Jafferau da Bardonecchia más
corto pero mucho más duro, con rampas que superan el 14% de desnivel.
La subida a Sestriere se hará desde Pourrieres y hasta llegar allí el terreno viene picando hacia arriba continuamente, por lo que si la etapa va rápida, tras esta primera subida los equipos pueden estar ya mermados de efectivos. La ascensión en Sestriere es larga, son 16 kilómetros, pero muy tendidos. De hecho, los primeros 9 kilómetros no acumulan más del 3% de desnivel medio. Los últimos siete kilómetros la carretera se empina un poco más, y el desnivel medio ronda el 6%, y el máximo es del 9%. Muy llevadera como podéis ver en el perfil, pero un lugar ideal si algún equipo quiere endurecer mucho la carrera pensando en la última subida.
Jafferau da Bardonecchia donde está situada la línea de meta, es otra cosa. Un puerto mucho más corto, apenas 7 kilómetros, pero con rampas ostensiblemente más duras, con un desnivel máximo del 14%. Es un puerto muy constante y duro como indica su desnivel medio cercano al 10% y donde los escaladores tendrán una magnífica oportunidad de jugar una de sus mejores bazas en este Giro. No será la última desde luego, porque lo mejor y lo más duro estará todavía por llegar y, por supuesto, os lo detallaremos en el Tío del Mazo.
