A pesar de que el ciclismo es un deporte que siempre se ha identificado con el pundonor, la resistencia y el sacrificio, hay otros factores que son muy importantes cuando se afronta una prueba. El apartado mental es decisivo en el ciclismo moderno y tener una buena preparación en este aspecto es indispensable. Por otro lado está la estrategia, algo que nunca puede faltar en un deporte de equipo, pero que cada vez cobra más importancia en esta especialidad. Por todo ello es curiosa la conexión que se establece entre el ciclismo y la práctica de algunos juegos de habilidad mental, y más concretamente del póker.
En ambos casos es de vital importancia el conocimiento que tiene el deportista o jugador sobre sí mismo. Uno de los aspectos sobre el que más trabaja un jugador profesional de póker es el de conocer sus propias debilidades. Conocer sus virtudes y defectos a la perfección es una baza que no puede obviarse a la hora de tomar cualquier decisión en un punto de la competición.
El conocimiento del rival es tan importante como el de uno mismo. Conocer perfectamente su perfil. Reconocer su lenguaje corporal, cada gesto. Si en los naipes la cara de póker se intenta contrarrestar buscando cualquier gesto corporal en el rival, en el ciclismo se busca cualquier indicio de debilidad para atacarle.
La estrategia es algo indiscutible en ambas prácticas. La concentración, la lectura de la partida o la carrera. En una gran vuelta por etapas no hay que pensar solo en cómo afrontamos un momento de una etapa, sino en la repercusión que ello tendrá en los consiguientes días. De igual manera en el póker hay momentos en los que incluso se puede perder para después dar un golpe definitivo.
El control de la situación. Saber mantener la calma cuando las cosas no salen según lo previsto. Mantenerse sereno cuando uno está perdiendo o cuando la carrera se descontrola. No precipitarse con una reacción que después puede ser determinante en su derrota final. En muchas ocasiones un mal momento o una mala racha puede atenuarse sin arriesgarlo todo y que de esta manera no sea definitiva en la carrera o la partida.
Sin duda el póker es un buen ejercicio de entrenamiento mental para un ciclista de élite. Uno de los defensores de esta teoría es Óscar Pereiro, ciclista gallego ganador del Tour de Francia 2006. Pereiro es un deportista singular y polifacético, por no decir hiperactivo. Desde su retirada del ciclismo profesional en 2009 ha sido futbolista, piloto y copiloto de rallyes, tiene su propia fundación y ha dado muestras destacadas de su habilidad en este juego de naipes.
El ex ciclista ha hecho gala en varias ocasiones de la misma actitud de estratega en las mesas del juego, que la que tenía sobre la bicicleta. Ha logrado triunfos en torneos como el obtenido en el programa “Estrellas en juego” de Antena3. De esta manera llegó a ganarse una plaza para un torneo satélite del European Poker Tour, codeándose con los auténticos profesionales.
Esto nos anima a en cuenta el póker como un ejercicio de cara a la práctica del ciclismo de competición. Hoy en día las grandes salas de póker online nos dan la ocasión de hacerlo de forma muy sencilla y desde nuestra propia casa. A la vez que nos divertimos podemos adquirir unos hábitos interesantes de cara a nuestro deporte.
