Por un Señor de Toledo.- Como cada mañana, la lectura de prensa, artículos en la red y ponerse al día de los asuntos de actualidad forma parte de nuestro ‘modus operandi’, lo normal del día a día, vamos. Y cómo cada jornada, uno se queda con unas impresiones u otras acerca de lo que se sucede por el mundo. Permitidme que en el día de hoy me explaye, o más bien me desahogue y me queje de lo que me ha parecido una broma de muy mal gusto para deportistas de élite como, por ejemplo, los ciclistas.
Me voy a explicar. El caso es que, según he podido leer, el pasado domingo un tal Lionel Messi, del que dicen que es uno de los mejores jugadores de fútbol de la actualidad, fue elegido para ser sometido por la AETSAD, (Agencia Española de Protección de la Salud por el Deporte), a instancias de la UEFA, a una doble analítica de orina y sangre. Algo que trajo la respuesta del jugador en su cuenta de Instagram, donde escribió: “Día de doping. De los 5 elegidos, fui el único que hice orina y extracción de sangre. Raro no…”; tal y como reflejan hoy distintos medios de comunicación.
Ante este hecho, la cascada de informaciones sobre cuál es el criterio de los controles de la AETSAD, cómo se eligen a los que pasan el control, porqué se hacen así los controles… y más cuestiones que no me apetece reseñar, es enorme; no os quiero aburrir… Tal parece ser el alboroto porque a una mega-estrella del mega-deporte, de mega-masas se someta a una analítica de orina y sangre; que de verdad no salgo de mi asombro.
Creo que ya me vais entendiendo del porqué antes afirmaba que había una cuestión que me parecía una broma de muy mal gusto para los ciclistas. Pues sí, a mí me lo parece y lo hace porque no llego a entender qué problema hay en que esto sea así y que un jugador de fútbol tenga que someterse a ese tipo de análisis, sea el jugador que sea que vaya esto por delante.
¿Qué estarán pensando deportistas cómo la inmensa mayoría de los ciclistas, atletas, nadadores o tenistas…por ejemplo? ¡Oiga, a mí me hacen análisis varias veces al año! ¡Yo tengo que decir donde estoy los 365 días del año, las 24 horas, porque en cualquier momento y a cualquier hora pueden llegar y solicitarme para pasar un análisis…!
A lo mejor soy un poco osado y pongo en boca de otros, palabras o ideas que no piensan, pero os aseguro que esto que yo os digo, lo tienen que estar pensando muchos, muchos deportistas, y por lo que a nosotros nos toca, muchos pero que muchos ciclistas.
Me da igual que sea Messi, que sea Cristiano o cualquier otro jugador de fútbol. Me da igual de qué equipo sea o qué colores defienda; lo que no me da igual es permanecer en silencio tras todo lo que os he contado. Señores futbolistas y señores señoras defensores a ultranza de sus jugadores, sus colores o lo que sea; esto es deporte y en el deporte de hoy no sólo hay que ser muy, muy bueno; también hay que estar limpio y para eso hay que pasar los controles.
No será mejor que digamos qué bueno es ese tío jugando al fútbol y que además se sepa que pasa sus controles y que está limpio… Entonces, dónde está el problema… Una mano negra que persigue a unos sí y a otros no… Mientras sigamos pensando así, flaco favor se le hace al deporte. Esa es sencillamente mi opinión.
A lo mejor no me habían dado vela para este entierro, a lo mejor hablo por hablar y sin un criterio tan formado como los que siguen al milímetro la actualidad del todopoderoso fútbol; pero como ya os he dicho, no me he podido morder la lengua.
Por todos aquellos ciclistas que ahora mismo estén pensando así, por todos aquellos que pasan sus controles sin quejarse y sin intentar dejar rastro de duda en sus redes sociales, por todos los controles que pasan al año los Contador, Valverde, Purito, Froome, Nibali y hasta el último de la clasificación de la UCI; para que esto que hoy puedan leer, ver o escuchar no les parezca una broma de tan mal gusto, como me lo ha parecido a mí.
