Por Un Señor de Toledo.- La primera jornada de descanso del Tour de Francia marca también un punto de inflexión muy importante en la ronda gala. Con la primera semana de carrera disputada, la cosa va a cambiar radicalmente, el guión a seguir por los corredores será otro; y los protagonistas, algunos de ellos, también cambiarán. Mañana comienza un nuevo Tour de Francia.
No es que estas primeras etapas del Tour no nos hayan gustado, ni mucho menos; al contrario, nos han parecido interesantes, emocionantes y de un gran nivel. La cuestión es que con la llegada de la alta montaña, la fisionomía del Tour y los grandes protagonistas serán otros, sin duda.
El primer asalto del Tour finalizó ayer y la principal conclusión que podemos extraer de él, en mi criterio, es que ninguno de los cuatro grandes favoritos al triunfo final está descartado, ninguno de ellos han perdido sus opciones de triunfo en París. Cierto es que no todos ellos llegan en un pañuelo, ya que claramente hay un claro vencedor en esta primera semana, el británico Chris Froome; pero también es igualmente cierto que ni Contador, ni Quintana, ni Nibali están descartados o ya fuera de carrera. Más aún, a la fiesta se ha unido un inspirado Tejay Van Garderen que parece que llega en estado de gracia, que está mejor que nunca y está reafirmado el papel que hizo en Dauphine.
Coincidiréis conmigo en que lo habitual es que la primera semana del Tour sirva para descartar a alguno de los favoritos, generalmente a causa de as caídas, pero casi siempre se suele caer alguien de la terna de los principales aspirantes a la victoria final en estos primeros días… Esta vez no ha sido así y no es porque no haya habido caídas o tensión o abanicos, lluvia, pavees… De todo eso ha habido, pero de mejor o peor manera los grandes favoritos han librado esta primera semana.
No pueden decir lo mismo hombres importantes y que han tenido que abandonar por caída, portando además el maillot amarillo, como Cancellara y Martin… Tampoco Dumoulin salió bien parado de la espeluznante caída masiva de la tercera etapa, en la que vivimos una circunstancia muy poco común, como fue la neutralización de la carrera por unos minutos.
Para gustos los colores y seguramente algunos de vosotros no estaréis de acuerdo, pero a mí me ha gustado esta primera semana de carrera… Más al estilo de la Vuelta, buscando algunas trampas o muros finales que añadan picante a la competición, con la inclusión de pavees, con alternativas a lo que puede ser una primera semana con opciones solamente para las llagadas masivas y los sprinters… Creo que el riesgo es mayor para el corredor que busca vencer en París; pero de cara al espectáculo es el camino que tienen que tienen que seguir carreras como el Tour, si quieren que en la primera semana se hable de algo más que de lo placentero que es dormirse mientras ves y escuchas ciclismo, como si de una nana se tratara…
En ese sentido, hemos vivido etapas con un interés muy elevado como las llegadas en los muros de Huy y Bretaña, como la etapa del pavés, como el día de los abanicos… Todo eso, aderezado con una implicación máxima de los corredores y de los equipos por llevar a sus jefes de filas lo más adelante posible, han hecho de la primera semana un bonito y muy digno espectáculo ciclista con mucho nivel.
Si tengo que decir a quien veo más fuerte por lo visto hasta el momento, digo sin duda Froome. Tampoco es nada extraño, ya que las apuestas están a día de hoy volcadas con la victoria del británico… Pero ojo, no vamos a vender la piel del oso antes de cazarlo, ya que si algo hay seguro de aquí al final de la carrera es que lo que hemos visto hasta el momento no es más que un aperitivo. Quedan las etapas más duras y decisivas… Eso es lo único seguro que podemos afirmar.
El primer asalto ha finalizado y a los puntos va ganando Froome, pero sus rivales van a buscar el K.O. del británico, o en su defecto, se lo van a poner muy complicado porque, no olvidemos; hay varias ruedas a vigilar… No es sólo un rival al que tiene que atar corto el británico. A día de hoy, son al menos cinco (Contador, Nibali, Quintana, Van Garderen y Valverde) y eso amigos; complica, abre las puertas a tácticas diferentes de cómo afrontar la cerrera es y es mucho más peligroso para el líder y muy, muy interesante para el aficionado…
