Por El Aguador – Se habla de vez en cuando sobre si montar mucho en bici afecta al rendimiento sexual o no. Desde luego, es una duda que cada cual puede responder mejor que nadie, pero para aportar algo de rigor al tema, os hablamos hoy de un artículo publicado en la web americana WebMC. Dicha noticia habla de dos nuevos estudios de la Asociación Americana de Urología que sugieren que el dolor en la ingle y el entumecimiento que sufren algunos ciclistas no son perjudiciales para su salud sexual o urinaria.
“A medida que el ciclismo gana popularidad, es importante que el público sepa que no tiene un vínculo creíble con la enfermedad urológica o la disfunción sexual”, explica el doctor Kevin McVary, portavoz de la American Urological Association.”Los hombres y las mujeres pueden beneficiarse del ejercicio cardiovascular del ciclismo sin preocuparse por los efectos secundarios negativos de su tracto urinario o rendimiento sexual”
La presión prolongada en el períneo o área de la ingle puede ser dolorosa y causar pérdida de sensibilidad en el área. Estudios previos sugerían que este dolor de la ingle podría conducir a la disfunción eréctil en los hombres y también tener consecuencias en el rendimiento sexual de las mujeres, dijeron los investigadores. Para investigar este tema, los investigadores encuestaron a 4.000 hombres de clubes deportivos de todo el mundo. Casi dos tercios eran ciclistas que no nadaban o corrían, y el 37 por ciento eran nadadores o corredores que nunca anduvieron en bici.
A los hombres se les preguntó acerca de su actividad física, la salud sexual y los síntomas de la próstata. El estudio encontró que la disfunción sexual y los síntomas urinarios no eran peores para los ciclistas que los corredores o nadadores. Pero, los ciclistas eran más propensos a tener entumecimiento perineal – independientemente del tipo de asiento de la bicicleta que utilizaran.
Los investigadores observaron, sin embargo, que los ciclistas tenían mayores puntuaciones de salud sexual promedio que los otros atletas. Concluyeron que el beneficio del ciclismo en el corazón supera cualquier riesgo urinario asociado con el deporte.
Por otro lado, un estudio separado que involucró a casi 2.700 mujeres atletas encontró que el ciclismo no tiene ningún efecto notable en la salud sexual o urinaria de las mujeres.
Según los cuestionarios cumplimentados, los investigadores también encontraron que las mujeres ciclistas tenían mayores puntuaciones en función sexual. Además, los síntomas urinarios no eran diferentes de los de las otras deportista.
Sin embargo, el estudio mostró que las mujeres que montaban bicicletas tenían un mayor riesgo de infecciones del tracto urinario. Los que montaron más de tres veces a la semana durante más de dos años también fueron más propensos a desarrollar entumecimiento perineal y llagas en su parte trasera.
Los investigadores definieron el ciclismo de alta intensidad como ciclismo durante más de dos años, más de tres veces por semana y más de 25 millas diarias en promedio.
