Por Techo Díaz.- Vaya por delante que soy muy fan de que la Vuelta innove. Los recorridos de los últimos años han sido espectaculares y lo que no se ha logrado en otros países aquí se ha conseguido: mantener la emoción hasta la tercera semana. Los numerosos finales en alto, las cumbres inéditas y las salidas desde mejilloneras o buques de guerra son un puntazo, pero claro, corren el riesgo de quedarse sin ideas. Así que, más con ánimo de entretener de que realmente nos escuchen, aquí van nuestras 10 propuestas para las próximas salidas de la Vuelta Ciclista a España de aquí a 2024.
1. Un castillo.- En España nos sobran. Hay incluso una región que se llama Castilla por la abundancia de estas construcciones. La verdad es que sería bastante épico ver aparecer al pelotón desde el puente levadizo de un castillo, por supuesto con foso y cocodrilos. Si encima hay mercado medieval a la salida, algo muy en boga en los últimos tiempos, sería el punto perfecto. Uno muy apañado para estos menesteres es el de Medina del Campo, aunque los hay de todos los gustos y colores.
2. La Alhambra.- Sabido es que los productores de Juego de Tronos se han fijado en Andalucía par recrear el reino de Dorne en la próxima temporada. Pero al final no ruedan en la Alhambra, con lo que nos queda libre para la Vuelta. Una salida desde los jardines que Boabdil no supo defender como un hombre emocionarían a moros y cristianos y sería visualmente impactante. No en vano, se trata de uno de los monumentos más bellos del mundo.
3. La Fábrica de Mahou.- No sé si habéis visitado alguna vez una fábrica de cerveza, pero son el sueño de cualquier hombre de bien. Cientos de botellines saliendo a la vez mientras una cinta transportadora los rellena, los etiqueta y los chapa. Puede ser Mahou como Estrella de Galicia, Damm, Cruzcampo o Ambar, pero la imagen es a todas luces fotogénica y enternecedora, además de un gran escaparate comercial para la marca.
4. El aeropuerto de Castellón.- Vendría fenomenal para darle un poco de uso. Y allí hay sitio para todos, es raro que los aviones estorben. Un reclamo internacional para lograr que nuestro aeropuerto más famoso logre captar el interés de alguna aerolínea despistada.
5. La Tomatina.- Si hace años se hizo un guiño a los sanfermines, por qué no hacerlo ahora con otra de nuestras fiestas más internacionales. Además, coincide en fechas ya que la fiesta grande de Buñol se celebra un día como hoy, el último miércoles de agosto. Eso sí, para dotarlo de espectacularidad y relieve internacional los ciclistas tendrían que pasar por en medio de todo el jaleo, en plena guerra de tomates. Se les permite eso sí, devolver algún tomatazo al gentío. Si no sería inhumano.
6. Un discotecón de Ibiza.- Pachá, Privilege, Amnesia… da igual el nombre, pero que sea grande y ostentoso. Con cientos de go-gos, música a todo trapo y con Pocholo y Pipi Estrada como speakers dando la salida. Y mucho famoseo en la grada-flotante. Imprescindible Orlando Bloom repartiendo collejas a Justin Bieber.
7. El palacio de la Zarzuela.- Felipe VI tiene un reto: ganarse los corazones de los españoles como hizo su padre, el rey campechano. Y para eso que mejor que invitar a jamón a los ciclistas en el jardín de su nuevo despacho. Unas risas por aquí, un estrechar de manos por allá, una palmaditas en el hombro. Y luego a tomar la salida después del aperitivo. Las imágenes mostrarían una corona abierta y sin complejos al mundo del deporte, y mucho mejor hacerlo con ciclistas que con jugadores de balonmano, que luego la gente es muy mala y murmura…
8. Carrera de velomares en la playa.- Sería espectacular y tremendamente fotogénico, y apenas se cambia de deporte porque también consiste en pedalear. A modo de traiatlón, los ciclistas podrían empezar la Vuelta agrupados de dos en dos en velomares, recorriendo de punta a punta alguna playa del Mediterráneo para después coger las bicis y disputar al sprint la primera etapa de la ronda española. Apenas habría diferencias, pero sería muy emocionante.
9. La Antártida. Si el Giro de Italia ha empezado en Irlanda y el Tour de Francia en Inglaterra, ¿por qué no vamos a llegar nosotros más lejos? Y sin salir de España, oiga. España tiene dos bases en la Antártida que sólo abren en verano, justo coincidiendo con la Vuelta. Los 33 habitantes de las bases Juan Carlos I y Gabriel de Castilla seguro que están encantados de recibir a la serpiente multicolor. Cierto que no hay mucho espacio donde pedalear y que el traslado es un poco largo, pero… el espectáculo es el espectáculo.
10. Un F-18. No se lo van a creer, pero en agosto de 2014 el pelotón salió desde un buque de la Armada. Así que ya no les queda más remedio que superarse. Un caza F-18 puede ser la solución. Será un gasto, eso sí, porque casi todos son monoplaza y tendrán que estrellarse, pero… ¿imaginan el espectáculo? A los ciclistas se les permitrá saltar antes en paracaídas y salvar la vida. Una vez en tierra, tendrán que encontrar su bici y recorrer un pequeño circuito de 35 kilómetros por alguna ciudad española con intereses turísticos. Esta vez, la primera etapa sí marcará diferencias.