Por Techo Díaz.- El ciclismo es el único deporte que tira piedras contra sus propias ruedas. Hace unos días, en el Tour de Romandía muchos se llevaban las manos a la cabeza cuando el ruso Ilnur Zakarin, hoy desaparecido en el Giro, cambiaba de bicicleta en la crono que le dio la victoria final en la prueba suiza. Ayer el nuevo líder del Giro, Alberto Contador, quien cambiaba de bicicleta unos 30 kilómetros antes del final de Abetone, primera llegada en alto de la ronda transalpina.
El showman y bello presentador de la televisión italiana, Mario Cipollini, no tardó en arremeter contra él. “No entiendo porque cada vez que hay una subida cambia de bici, es el único que lo hace. En este tiempo, los escépticos tienen ganas de criticar un movimiento realmente limpio insinuando que pueda haber motores en el tubular. Haciendo esto Contador alimenta las dudas porque, repito, antes de la última subida lo hace siempre y es el único”, dijo en la retransmisión de la RAI.

En el estudio estaban también los ex ciclistas y diresctores deportivos Garzelli, Reverberi y Pellizzotti, que dieron por buenas las insinuaciones del sprinter al viejo estilo de “quien calla otorga”, sin discutirlas en momento alguno.
Cipollini comentó también, con toda la razón del mundo, que no entiende porque corredores como Fabio Aru o Richie Porte no aprovecharon para atacarle cuando cambiaba de bicicleta. “Si yo fuese en el grupo no le daría oportunidad. Cuando corría yo si me paraba para cualquier cosa de este tipo, el grupo me dejaba atrás sin ayudas para poder recuperarme”, añadió.
Sin entrar a valorar la elegancia de esta práctica, lo cierto es que atacar cuando el rival sufre algún percance es más viejo que el ciclismo, y se ha visto toda la vida. El mismo Contador no tuvo reparos en atacar a Schleck cuando tuvo problemas con el cambio y decenas de corredores se jugaron la vida hace poco en la Paris Roubaix atravesando una paso a nivel cuando las barreras ya estaban bajadas y el tren ya se aproximaba.
Puede ser más bonito o más feo, pero forma parte de la competición atacar cuando el rival sufre un percance. Lo que no tiene mucho sentido, en mi opinión, es sembrar las dudas sobre cualquier corredor que gane insinuando que lleva un motor en la bicicleta.
A día de hoy, no tenemos datos para afirmar que el “dopaje tecnológico” esté fuera del ciclismo. A lo mejor tienen razón él y todos los que piensan que Cancellara, Hesjedal, Contador y Zakarin llevan motores en sus bicicletas. Pero de momento no se ha demostrado ningún caso, y ya bastante precio ha tenido que pagar el ciclismo por los errores que se han cometido.
Es importante vigilar para que se no produzcan más, e intensificar los controles en las bicicletas. Pero por una vez, a modo de prueba, deberíamos respetar la presunción de inocencia de los ciclistas. Incluso de los que ganan.
Contador, a todo esto, ha respondido también a la preguntas sobre el cambio de bici en la televisión italiana. De manera bastante clara. “No tiene nada que ver con motores”, ha dicho antes de reírse.

Video con la respuesta de Contador: aquí