Por Techo Díaz.- Soy de los que pienso que debería existir una asignatura completa obligatoria sobre el uso de la bicicleta en todas las escuelas públicas o privadas. Por muchas razones, pero sobre todo porque en el futuro la bici va a ser un elemento imprescindible en la configuración de las ciudades, y conocer sus normas y características sería muy positivo para todos, monten o no en bicicleta.
Cuando yo estudiaba eso que ahora está tan de moda en libros y festivales, la EGB, no había ningún tipo de consideración a la bicicleta, pero tampoco a las normas de circulación. Recuerdo entonces que miraba con envidia a los institutos de Estados Unidos, donde los americanos, aparte de poder conducir a los 16, se sacaban el carnet directamente en el colegio, aprobando una asignatura especialmente habilitada para ello. En España tenías que esperar a los 18 para poder apuntarte a la autoescuela, que costaba una pasta absolutamente desequilibrada para los ingresos (o no-ingresos) de un chaval de 18, 20 o 25 años recién cumplidos.
Pienso que la educación vial debería ser obligatoria, no optativa, y subvencionada de alguna manera por el estado, esto es, incluida en algún plan de estudios como asignatura a impartir. Y qué mejor manera de hacerlo que a través de algo tan atractivo para gran número de chavales como la bicicleta, probablemente el primer vehículo realmente suyo que tendrán en su vida. No olvidemos que desde el momento en que se hacen con una bici, además de hacer deporte y saborear algo parecido a la libertad, circulan por carreteras donde se cruzan con todo tipo de vehículos, y están expuestos a todo tipo de caídas o lesiones que pueden evitarse con un correcto uso de la bicicleta.
De la bici hay mucho que aprender, no se nace sabiendo, y de eso precisamente se ocupan los talleres o cursos que algunas asociaciones o tiendas privadas imparten por toda España. Ha llegado a nuestras manos, por ejemplo, el que este sábado imparte la gente de Cykel, una tienda de Villanueva de la Cañada (Madrid) en la jornada solidaria que organiza la Fundación Ana Carolina Díez Mahou, una organización que ayuda a los niños con problemas neuromusculares.
En el curso, que se impartirá en el Colegio Antavilla School de Villanueva del Pardillo, los niños no sólo recibirán consejos sobre seguridad vial, sino también cómo inflar una rueda, revisar los frenos, colocarse el casco, llevar la mochila en la espalda, gestionar las llamadas o mensajes en el móvil o dejar atada la bici para que no nos la roben. Esa información se completará con unos ejercicios de control de la bici para trabajar el equilibro y entrenar la circulación, no la de la sangre sino la de las principales calles de la ciudad.
Y es que ir en bici tiene su dificultad. Dicen que no se olvida nunca pero también es cierto que es porque hay quien no ha aprendido nunca, y eso dice muy poco de nosotros. Si en la EGB jamás nos lo contaron bien, ahora sí estamos a tiempo de enseñárselo a los más jóvenes. Y tal vez una asignatura anual sea excesiva, pero desde luego estos talleres son más necesarios que nunca, dada la expansión que la bici tiene y va a tener en un futuro como medio de transporte. Enhorabuena a la gente de la Fundación Ana Carolina Díez Mahou por acoger e impulsar actividades como esta, y a la de Cykel por promoverlas. Que pronto veamos muchas más.