Tengo muchísimo aprecio a los Reyes Magos. Esa gente se portó muy bien conmigo cuando era pequeño. Pero de unos años a esta parte no dan ni una. Y eso cuando me traen algo, que últimamente ni eso…
Por eso me mola más la pagana tradición de las rebajas, que empieza justamente después y permite comprarte lo que realmente deseas o necesitas. Más lo primero que lo segundo porque ya se sabe que en el primer mundo, aparte de tiempo libre, necesitar necesitar no necesitamos nada.
Pero sí que hay cosas que molan que te puedes comprar en enero. Especialmente las relacionadas con el deporte, ya que enero es por definición el mes de los regordimientos. Da igual lo fuerte que seas, en Navidad has pillado kilo. Si no es el turrón es el mazapán, y si no el panettone, los kinder bueno o los buenos vinos. Has pillado y lo sabes, y por eso te planteas apuntarte a un gimnasio en el que, casualmente, tienen una promoción que te sale tirada si te apuntas todo el año.
No lo hagas. O no lo hagas si tienes bicicleta. Te vas a divertir más, vas a ver el mundo desde otra perspectiva y además es probable que pierdas peso. Según un tweet de la Guardia Civil, si durante todo un año vas al trabajo en bicicleta se pierden de promedio unos 5,9 kilos de peso. Mucho me parece, pero no seré yo quién contradiga a la Benemérita. Porque número arriba número abajo el mensaje es correcto. Se pierde mucho peso si de manera continua usamos la bicicleta.
Pero a lo que vamos. Llegan las rebajas de enero y, a poco que busquemos, se convierten en la mejor época del año para comprar. También en ciclismo. La cuesta de enero es mucho menos dura si vamos correctamente abrigados.
Por eso en El Mazo estamos que lo tiramos. Maillot en gris y amarillo, alta calidad y exageradamente bonito, por solo 34 euros. Su correspondiente culotte por 44 euros. Sólo hasta fin de existencias, y quedan pocas. Una auténtica compraza. Hay ratones ahora mismo peleando por ser el primero en hacer click sobre el producto.
Luego están las camisetas. Las rebajas las han dejado en solo 9,95 euros. Aunque quedan pocas están las clásicas: chuparruedas, me pierden las curvas, tete de la course o iba bien pero me atizó el tío del mazo. Ropa que mola a precio de saldo. Lo que vienen siendo las rebajas, vaya.
Y la oferta se completa con gafas, guantes y ropa de invierno femenina. Precios escandalosos en gafas polarizadas (desde 25 euros) y descuentos de hasta 35 euros en ropa de invierno. Y es que no solo de Zaras vive el hombre. Las rebajas también llegan a Internet, y también llegan al ciclismo.
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