Hoy, lunes 30 de marzo de 2020, hemos interrumpido toda la producción de ropa de El Tío del Mazo. Va en la línea con lo dispuesto en el Decreto Ley que paraliza toda la producción no considerada indispensable en España. Y nos parece perfecto. Ante todo, queremos garantizar la salud de todos nuestros trabajadores, todos nuestros clientes y en definitiva de la humanidad entera. Y lo mejor, por ahora, es parar un tiempo.
Quedan pendientes algunos pedidos que saldrán adelante. Tenéis nuestro compromiso de que llegarán, porque estamos desando trabajar, pero ahora la salud es lo más importante. Tan pronto como las autoridades sanitarias dictaminen que ya se puede volver al tajo volveremos, porque nos encanta hacer ropa, nos encanta nuestro trabajo y nos emociona que la gente sea feliz montando en bicicleta con ropa especialmente diseñada para ellos.
No vamos a prescindir de nadie, ni vamos a parar de trabajar salvo por una razón. Fabricamos en España y en España las fábricas están cerradas. Aguantaremos todo lo que podamos, que esperamos que sea, al menos, lo suficiente para salir juntos de esta crisis y volver a pedalear.
No nos vamos a ningún sitio. Nos quedamos en casa, teletrabajando. Podemos ayudaros con el diseño de nuevas prendas si queréis emplear este tiempo en soñar con la equipación perfecta. Seguiremos escribiendo, y compartiendo noticias y chascarrillos en el blog y las redes sociales. Y mejorando todo aquello que esté en nuestras manos.
Es tiempo de cuidarse, y cuidarnos. Las carreteras y caminos seguirán ahí, y cuando sea el momento volveremos a llenarlos con más fuerza que nunca. El bicho es muy cabrón, pero los ciclistas somos aún más tozudos. Y, tarde o temprano, vamos a atizarle fuerte con el mazo.