El ciclismo está de moda. Y eso se nota hasta en las fiestas de los pueblos. Ayer, la localidad abulense de La Adrada tuvo un pregonero muy especial, el ganador del Tour de 2008.
Aunque nacido en Getafe, todo el mundo sabe que Carlos Sastre es de El Barraco. Como Ángel Arroyo, segundo en el Tour del 83, o su añorado cuñado, el Chava Jiménez, mito entre los mitos y ganador, entre otras cosas, de la primera subida al Angliru. Y El Barraco está a solo 46 kilómetros de La Adrada, unos 40 minutos en coche.
Una buena razón para poner el ciclismo en el centro de algo tan especial como unas fiestas de pueblo. Carlos Sastre fue el pregonero en un pueblo donde el ciclismo también se practica y se venera, aunque no haya campeones conocidos, y que además -como resaltó el alcalde- ha dedicado el año 2022 a la bicicleta.
Desde el balcón del ayuntamiento, el que fuera corredor del CSC o del Geox, dedicó unas breves palabras a los fiesteros allí reunidos. No dijo gran cosa, pero tampoco hacía falta. Lo importante -y lo bonito- es que el ciclismo gane protagonismo también en estos pequeños detalles.
