Por Techo Díaz. Muchas y muy variadas carreras se disputan este año el Mazo 2013 en esta categoría. No es basta con llegar, hay que mantenerse, renovarse, no morir. Por ello, entre las nominadas no va a estar la que era y sigue siendo la mejor carrera del mundo. El Tour es el Tour, claro, pero en 2013 no se lució. No fue la más cuidada ni la más emocionante y las alergias a las innovaciones le pasaron factura. Cosa que no pasó, por cierto, con el resto de las nominadas. Aquí van nuestras sugerencias…
Vuelta Ciclista a España. Tercer año seguido que se cubre de gloria. No tanto por el esquema de muros o finales en alto que tanto gusta a algunos y tanto fastidia a otros, sino por haber sabido mantener la igualdad hasta el penúltimo día. Emoción desde el día 1 hasta el día 20 es lo máximo que se le puede pedir a una gran ronda por etapas y la Vuelta lo consiguió en 2013. Chapeau, Vuelta, chapeau.
Campeonato del Mundo (Florencia). De agridulce recuerdo para el combinado español (hay frases en las que cuesta poner equipo), lo cierto es que el recorrido invitaba a la batalla, y así fue. Además de acabar en una de las ciudades más bellas del mundo, hubo guerra hasta la última pedalada. Un campeonato del mundo no es un sprint del Tour de Francia, lo tienen que ganar los mejores del mundo, o los que más en formas están en ese momento de la temporada. Y así fue. Un italiano, un portugués y dos españoles se jugaron el todo por el todo en la ciudad de los Medicis. Pasión latina en las calles de Florencia.
Dauphine Liberé. La ronda pre-tour por excelencia volvió a ser lo que era. Si bien tuvo un dominador claro, al menos se vieron las caras todos los que luego se jugarían el todo o nada en la ronda francesa. La carrera del delfinato volvió en 2013 a reivindicar su protagonismo. Es algo así como los Globos de Oro del ciclismo (la ceremonia que precede a los Oscar) y así debe seguir siendo. Por mucho tiempo.
Paris-Roubaix. No es que haya hecho nada especial en 2013, pero de la carrera del pavés se espera precisamente eso, que no cambie. Si así lo hace, tendrá un hueco en esta categoría por los siglos de los siglos. Por algo es una de las carreras más bellas del mundo.
Tour de Noruega. Es un outsider en esta edición de los Premios Mazo. En principio no cuenta para la victoria. Escaso reconocimiento internacional, país sin mucha tradición, figuras del ciclismo que se hacen los suecos… ¿Qué por qué está aquí? Porque la organización ha sabido apostar por un tipo de carreras en auge, con muchísimo futuro y con atractivo para los patrocinadores: el turismo de paisaje. Vean si no la impresionante foto que cierra el post.
Roma Máxima. Y por último, por la misma razón y muchos más encantos, está La Roma Máxima. Celebrar un triunfo en el Coliseo no es moco de pavo. Desde antiguo ha obsesionado a los humanos, que desde tiempos de Vespasiano se han repartido infinidad de hostias sólo por poder hacerlo. Ya era hora de que llegase, también, el turno de los ciclistas. Chapeau por esta carrera ciclista, reinventada en 2013 para sustituir al Giro del Lazio. Aún no es un clásico, pero no tardará en serlo.
Estas son algunas de las opciones que sugerimos para el premio, pero no olvidéis que podéis votar la que queráis, y que entre los votantes sortearemos premios como un estuche para iPhone con los accesorios para instalarlo en la bicicleta.
Cómo votar: En el formulario a continuación, en los comentarios de este post, en nuestro Facebook o en Twitter con el hashtag #PremiosMazo. Sólo hasta el 22 de diciembre.