Por Techo Díaz.- Peter Sagan cada vez se parece más a una estrella de rock. Su melena cada vez más estilizada, sus bailes a lo travolta y su notoriedad dentro y fuera de las redes lo convierten en un personaje de culto muy distinto al resto de todos los ciclistas.
Él lo sabe y se recrea con ello. Y como el niño travieso que aún es, se dedica a divertirse con las redes sociales. O a promocionarse, quién sabe si de forma deliberada. Casi siempre con acierto.
Hoy ha vuelto a retomar su línea épica colgando un cartel que anuncia su presencia en la Tirreno Adriático, la carrera de los Dos Mares. Como ya hiciera unos días con motivo de las clásicas belgas (donde homenajeó con gracia al Tío del Mazo), el eslovaco vuelve a recurrir a la épica para anunciar su presencia a la carrera.
Es una línea que – a nosotros y a los jugadores de rol- nos encanta, y parece que a sus fans también a juzgar por los cienes y cienes de retuits que está cosechando. Sagan, una vez más, desafía a los elementos a lomos de una bicicleta, navegando entre los mares, respondiendo a la llamada de Neptuno. Toda una declaración de intenciones.